Mayakoba: El Torneo del PGA Tour con Sabor Español que Abrió Puertas y el Coste de Perseguir un Sueño en el Golf

La Audaz Génesis Española del Resort Mayakoba en el Caribe Mexicano

Hace ya 24 años, en una playa remota a casi ocho mil kilómetros de Madrid, la selva y los manglares fueron testigos del inicio de la apuesta más ambiciosa de una empresa española por el mundo del golf. La multinacional OHL, liderada en su momento de esplendor por Juan Miguel Villar-Mir, concibió la marca Mayakoba, un complejo de lujo que hoy es mundialmente conocido. El resort alberga cuatro hoteles de alta gama y un espectacular campo de golf, El Camaleón, diseñado por Greg Norman con una ingeniería monumental donde todo se conecta a través de canales, convirtiéndose además en un referente de la sostenibilidad.

El ‘Milagro’ de Llevar el PGA Tour por Primera Vez Fuera de EE. UU. y Canadá

El objetivo inmediato para dar a conocer este enclave en Playa del Carmen, cerca de Cancún (México), fue atraer al escaparate más prestigioso del golf: el PGA Tour. Este era un reto mayúsculo, pues el Circuito Americano nunca antes había celebrado un torneo fuera de su territorio y Canadá.

“Para generar un destino de golf pensamos en atraer al circuito más prestigioso del mundo, que hasta esa fecha nunca había salido de Estados Unidos y Canadá,” explica Andrés Pan, antiguo director de desarrollos de OHL y uno de los artífices clave del proyecto. Pan subraya el mérito de este logro, considerando que el PGA Tour recibía anualmente unas 200 propuestas para acoger torneos.

La calidad de la infraestructura y la tenacidad de Villar Mir y su equipo consiguieron una fecha histórica: el 22 de febrero de 2007. Ese día se celebró la primera edición del entonces llamado Mayakoba Golf Classic (hoy World Wide Technology Championship at Mayakoba). El veterano Fred Funk se alzó con el trofeo, un pesado galardón de piedra con la forma del camaleón, entregado por un orgulloso Villar-Mir.

Un Legado Consolidado y el Apoyo al Golf Español

Desde aquel debut hace 16 años, el torneo se ha consolidado como una parada predilecta para la élite mundial del golf. Nombres como Dustin Johnson, Justin Thomas, Brooks Koepka, Sergio García y José María Olazábal han pasado por la Riviera Maya, confirmando el éxito de la inversión inicial de OHL. Aunque la empresa vendió Mayakoba en 2018 al grupo mexicano RLH, liderado por el empresario español Borja Escalada, el proyecto se sigue cuidando con esmero.

La visión de OHL fue más allá de lo deportivo. Andrés Pan señala que su objetivo fue “crear un destino que replanteó la tipología del turismo en la Riviera Maya.” Con el 50% de los 60 millones de golfistas del mundo residiendo en Estados Unidos, la estrategia llenó los lujosos hoteles de golfistas americanos y canadienses, ofreciendo un modelo de turismo distinto al clásico “todo incluido” predominante en la zona.

Además, el torneo ha sido un motor de apoyo al golf español, por el que han pasado más de 30 jugadores de nuestro país. El evento marcó el debut de Jon Rahm en el PGA Tour en 2014, cuando era todavía amateur. El golfista de Barrika, que cumplía 20 años ese día, se quedó a solo un golpe de pasar el corte. También sirvió como plataforma de lanzamiento para figuras como Eugenio López Chacarra.

El Elevado Coste de la Persecución del Sueño del PGA Tour

Mientras el torneo de Mayakoba ejemplifica el éxito de la élite, el camino hacia el PGA Tour sigue siendo una lucha financiera para muchos profesionales. James Nicholas, un jugador de 29 años graduado en Yale que compite en el Korn Ferry Tour (KFT), ha ofrecido una visión transparente de la dura realidad económica.

En 2025, Nicholas jugó 26 eventos del KFT, terminando 64º en la clasificación. Esto le permitió conservar su tarjeta para 2026, aunque fue insuficiente para ascender al PGA Tour. Nicholas, que también es una estrella emergente en redes sociales, reveló sus cuentas en Instagram.

Sus ganancias totales en el campo en 2025 ascendieron a $255.058 (sin incluir patrocinios). Esta cifra incluye $173.507 obtenidos en el KFT, $43.544 por un T61 en el U.S. Open de 2025, bonificaciones y una pequeña cantidad del Minor League Golf Tour.

Lo más revelador es el alto nivel de sus gastos. Entre viajes (alojamiento, alquiler de coches, vuelos), salarios de caddies, entrenadores, preparadores físicos e incluso el coste de su equipo de YouTube, los gastos totales de Nicholas para el año sumaron alrededor de $150.000. Afortunadamente, su buen rendimiento le permitió terminar el año con una ganancia neta superior a los $100.000, una realidad inalcanzable para muchos otros golfistas que persiguen el mismo sueño.

Detalle de Gastos e Ingresos de James Nicholas en 2025